No vemos ni la mitad de lo que ocurre por Nicolás Luco

Diario El Mercurio, lunes 1 de octubre de 2012

http://diario.elmercurio.com/2012/10/01/ciencia_y_tecnologia/mas/noticias/B3B370E8-92E5-4396-86A6-38649729AD2F.htm?id={B3B370E8-92E5-4396-86A6-38649729AD2F}
 

A veces la observo, la Magda está quieta con los ojos fijos en el espacio, paralizada. ¿Qué tienes en la mente? Es de cuatro años. ¡Sale con cada cosa!

("¿Qué tienes en la mente?" es diferente a "¿Qué estás pensando?").

Mi neurólogo, ex profesor en la Facultad de Medicina, me comentaba lo poco que sabemos de este órgano indispensable.

Pero algo sabemos. O suponemos. Por ejemplo, hoy sabemos que las neuronas, las células del cerebro, pueden aprender nuevas funciones; tan elástico es el órgano.

También desde hace muy poco sabemos que las neuronas no son como los óvulos femeninos -el mismo número y listo-; el organismo puede generar nuevas neuronas. Desde muy antiguo, también, se supo que los cerebros de los hombres son de distinto tamaño que los de las mujeres, un atentado a la igualdad.

Esas cosas aparecerán desde hoy a la vista de muchos en Chile. Parte la anual "Semana de la Ciencia" que organiza la Comisión Nacional Científica y Tecnológica (Conicyt) a través de su programa Explora. Su tema: la neurociencia.

Así es que en 20 ciudades habrá desde desfiles con pancartas de neuronas en Antofagasta, hasta una muestra interactiva sobre la percepción en la plaza de Coyhaique.

(Vi la lista. Algunas experiencias son una lata, si me preguntan a mí, pero aplaudamos las entretenidas).

Yo voy a ir a recorrer la feria que José Miguel Aguilera, el presidente de Conicyt, inaugura en la Quinta Normal pasado mañana.

Me huele a juego. A sorpresas que dejarán a mi nieta Magda ojiabierta y luego como estatua procesando todo en sus neuronas, como si ninguna otra célula existiera.

Ojalá que no nos obliguen a memorizar demasiadas cosas. Ojalá ningún profesor diga que las cosas ocurren por magia.

Yo creo que a la Magda no le interesan los nombres de las cosas todavía. Es más musical su mirar.

Hay tanto que mostrar. Conicyt-Explora ha trabajado por semanas preparando lo que ocurrirá en estos días.

Escucho a la gente decir que lo que se necesita es educación, educación y educación. Educación en Chile es pasar materia. Terrible. En cambio, los abuelos que ya venimos de vuelta podemos, sin pretender enseñar, abrir ojos.

Por ejemplo, yo estaba en una charla de Pedro Maldonado, de la Universidad de Chile, y él anunció que iba a mostrar una película de unos jugadores de básquetbol.

"Cuenten los botes de la pelota" fue la instrucción. Todos en la sala llegamos a 11 o 14. "Bueno, ahora miren la película sin contar los botes", dijo el Dr. Maldonado.

¡Casi nos desmayamos! Un inmenso gorila había circulado por la cancha entre los jugadores; nosotros estábamos tan pendientes de contar los botes de la pelota que nadie lo había visto. Je je je, dijo Maldonado y dio una explicación. ¡Qué impacto!