WELCOME TO YOUR BLOG...!!!.YOU ARE N°

Fontaine dice que temas de Conicyt tendrán más prioridad en Economía que en Educación

Defiende traspaso de la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica a su ex cartera:


Ex ministro plantea que la política de innovación ya se está coordinando desde el ministerio a cargo de Pablo Longueira y que es un prejuicio que la institución tomaría un sesgo "economicista" con este cambio.  

por Marina Alías 

Diario El Mercurio, Economía y Negocios, jueves 11 de octubre de 2012

Tras el anuncio del ministro de Economía, Pablo Longueira, sobre la intención del Gobierno de enviar un proyecto de ley en 2013 -en el marco del Año de la Innovación- que permita cambiar la dependencia de Conicyt del Ministerio de Educación a la cartera de Economía, han sido varias las voces vinculadas al ámbito académico y a la comunidad científica que han expresado su disconformidad e, incluso, su rotundo rechazo.
La idea del traspaso de la entidad fue barajada durante el mandato del anterior ministro de Economía, Juan Andrés Fontaine, quien reconoce que, aunque fue planteada "en bruto", suponía darle al Conicyt una institucionalidad mucho más robusta, con un consejo conformado por personalidades del ámbito de la ciencia y de la innovación -el actual no opera desde 1974- y que funcionase como una institución autónoma relacionada con el Gobierno a través de Economía.
-¿Por qué surge la idea de traspasar Conicyt a Economía?
"La política de innovación del Gobierno ya se coordina y maneja desde el Ministerio de Economía. Por ejemplo, al ministro le toca presidir el Comité de Ministros para la Innovación y ese comité recibe, además, el apoyo del Consejo Nacional de Innovación para la Competitividad (CNIC). Además, los brazos operadores de esa política son, por un lado, Corfo, que pertenece a Economía, y Conicyt, por otro. Cuando fui ministro y presidí ese comité, a lo que más destiné tiempo fue a lograr la mejor coordinación posible entre los diferentes actores de este ecosistema de la innovación en Chile y, grosso modo , creo que esa coordinación funcionó bien: fortalecimos Fondecyt; creamos Fondequip y la Iniciativa Científica Milenio fue asumida por Mideplan. En este contexto, surgió la idea de trasladar Conicyt al Ministerio de Economía, para facilitar la coordinación".
-¿Por qué no es posible desde la cartera de Educación?
"El Ministerio de Educación está muy absorbido en el manejo de los temas de educación primaria, secundaria y universitaria. Y eso son problemas que tienen urgencia y que involucran un manejo de recursos muy altos. Inevitablemente, los temas vinculados al desarrollo de la ciencia a través de Conicyt quedan relegados, tienen una prioridad más baja".
-¿Tendrían más prioridad en Economía?
"El Ministerio de Economía está a cargo de esta política de innovación. Pero tampoco es trasladar Conicyt directamente al ministerio actual de Economía, donde el ministro a veces tiene que estar muy condicionado por factores a corto plazo, como los que surgen de los problemas sectoriales. El ministerio que yo pensaba para albergar Conicyt estaba enfocado en el largo plazo. Era un ministerio de economía e innovación que tendría como funciones básicas la economía, la competitividad, la productividad y la regulación de la competencia e innovación, sacándole aquellos aspectos de regulación sectorial que tiene hoy en día como, por ejemplo, pesca. En ese diseño, me parece que Conicyt calzaría bien para efectos administrativos y presupuestarios".
-Algunos creen que la idea esconde una visión un tanto "economicista"...
"Es un gigantesco malentendido. Durante este período presidencial, la coordinación de la política de innovación desde Economía le ha dado gran importancia a Conicyt porque el desarrollo de la ciencia y la tecnología son ingredientes fundamentales de la creación de una cultura pro innovación. De hecho, cuando yo estaba de ministro tenía intenso contacto con Conicyt, y siento que la entidad se sentía muy apoyada por nuestra labor desde Economía".
-¿Quedarían relegadas las universidades?
"Cuando discutíamos la posibilidad de transferir Conicyt hacia el ámbito de Economía, uno de los temas a debatir era qué divisiones de la institución se traspasarían. Había gente que veía que la sinergia entre Conicyt y la política universitaria era tan fuerte, que consideraba que era mejor que estuviese todo en una misma mano".
"A mí me parece válido, pero yo creo que hay méritos para dividirlo y dejar lo referente a educación superior en Educación, así como algunas becas -tanto para chilenos como para extranjeros-, que hoy administra Conicyt, sin que sea, en mi opinión, una función propia de desarrollo de ciencia y tecnología. Por otro lado, traspasaría fondos como Fondecyt a Economía".
-¿El traspaso afectaría las áreas de humanidades o ciencias sociales?
"Muchos piensan que quedarían con una prioridad muy baja, porque suponen que el Ministerio de Economía no les daría importancia. Y para mí, eso es otro malentendido, incluso un prejuicio. Basta conocer las empresas exitosas de Silicon Valley para ver la importancia que le dan a la contratación no solamente de científicos, sino también de antropólogos y diseñadores. Hoy día, las humanidades, las ciencias sociales y el diseño son muy importantes para crear valor en las innovaciones".
-¿Cómo debería actuar el gobierno?
"Desconozco los planes del Gobierno, pero lo que tiene que hacer es diseñar un plan donde se dé mayor robustez institucional a Conicyt, al CNIC, al propio Comité de Ministros para la Innovación. Creo que todas estas estructuras operan de buena forma, pero la institucionalidad es más bien precaria".
"El Gobierno se planteó inicialmente una meta de duplicar el gasto en I+D desde el 0,4% del PIB al 0,8%. Vamos en 0,5% el año antepasado. Creo que vamos lentos en esa materia. Para desarrollar bien ese tipo de política, lo más importante es que todas estas piezas trabajen de forma coordinada y con un volumen suficiente de recursos como para ser efectiva".
-¿Sería bueno un ministro de ciencia y tecnología para lograr más recursos?
"En la discusión presupuestaria finalmente lo que ocurre es que hay necesidades ilimitadas y recursos siempre muy escasos y, en esa disyuntiva, es muy importante que la ciencia y tecnología lleguen a la mesa con un buen socio. A veces los científicos y algunos académicos piensan que un buen socio sería un ministro de ciencia y tecnología. Yo pienso que no está claro, y que un mejor socio puede ser un ministro de Economía e Innovación que justifique frente al resto del Gobierno que esas materias son pieza esencial en una estrategia de innovación que haga posible sostener un crecimiento económico y social a buen ritmo. Por eso creo que sería bastante indicado que la ciencia y la tecnología estuviesen en un ministerio de Economía, que fuese la única instancia ministerial que mire al largo plazo".

No hay comentarios:

Publicar un comentario

COMENTE SIN RESTRICCIONES PERO ATÉNGASE A SUS CONSECUENCIAS