DISCURSO DEL CONSUETA CONSUETUDINARIO
No esperen de lo que viene a continuación nada extraordinario
Así como no espero ninguna manifestación de carácter multitudinario
Ya estamos por dar vuelta, una vez más, la última hoja del calendario
En la próxima pasada, si llego vivo, seré un mozalbete sexagenario
Aunque seguro que los que me conocen considerarán este juicio arbitrario
Ya que por irritable y neurasténico seré más bien un vejete atrabiliario.
A estas alturas de la vida más que currículum tengo prontuario
y merecería ser contado como un delincuente o un presidiario
pero, qué se le va a hacer, con este pelafustán de aspecto patibulario
al que hay que callar de una vez por todas por insoportable y contestatario.
No se requiere de cualidades de pitoniso, profeta o visionario
para vislumbrar que si sigo así voy a terminar enjaulado como un canario
y pasaré mis últimos días encerrado con otros buitres en un aviario
callado el loro, por largo tiempo, a ver si llego a convertirme en un nonagenario.
Entonces miraré el pasado como lo contempla un anticuario
Escogiendo entre tanto vejestorio algún preciado relicario
Las oportunidades perdidas, los momentos que se nos fueron a diario
El pasado que no fue, clavado en el corazón como en un insectario.
No habrá más oportunidades, sólo me acompañará el rezo del rosario
y la liturgia de las horas, que se harán más llevaderas con la lectura del breviario
Recordaré los cantos de los monjes, la adoración al Santísimo y el incensario
E intentaré convertirme dándome una vuelta por el confesionario.
Repasaré toda mi vida, lo bueno y lo malo, desde el silabario
Y todo lo que hay que mejorar, partiendo por el sistema carcelario
Perdonen que me ponga monotemático, pero lo mío es lo penitenciario
sobre todo después de lo que pasó en la cárcel de San Miguel y el incendiario.
Porque no me voy a preocupar de lujos y de lo relacionado con lo suntuario
ni de la política o la ideología o de todo los males que provienen de lo sectario
Ya no hay tiempo, no hay dinero, ni para el más sencillo rito funerario
por lo que no me preocupa si termino en la fosa común o en el cinerario.
A qué vienen estos sombríos pronósticos cuando estamos fuera de horario
Y a quién le interesa lo que piensa o siente este viejo estrafalario
Qué mejor se dedique a otra cosa, que ponga al día su inventario
Si quiere, que escriba sus memorias, para que las lea algún bibliotecario.
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