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A pesar de las acusaciones que han recibido de abuso de poder en contra de los estudiantes y los mapuche, la institución se mantiene entre las más valoradas gracias al rol social que cumple.
Los expertos difieren en los efectos que tiene la labor de represión de FF.EE. en la imagen institucional de Carabineros.
Foto: EFE.
SANTIAGO.- Uno de los datos más relevantes que entregó la última encuesta CEP hace unas semanas fue la alta aprobación ciudadana que obtuvo Carabineros de Chile, institución que regresó al primer lugar de las más valoradas del país, con un 58% de menciones positivas.
Esta cifra contrastó notoriamente con las acusaciones que se han realizado en las últimas semanas contra el proceder de la policía en las manifestaciones estudiantiles y las protestas mapuche en la Región de la Araucanía, factores que durante el año pasado hicieron descender el nivel de apoyo hacia la institución.
A juicio del director de Adimark, Roberto Méndez, este aumento en la confianza de Carabineros no es menor, considerando que "hemos visto que el Gobierno, la oposición, el Congreso, el Poder Judicial, la Iglesia, prácticamente no se salva nadie. Hay un proceso de desconfianza, de incredulidad en general de las instituciones y en ese sentido llama la atención justamente que Carabineros haya logrado mantenerse bastante alto".
Sin embargo, Méndez señala que los datos de la CEP "hay que leerlos con cuidado, porque en el año 2011 se había producido una baja bastante fuerte en el momento más álgido de las confrontaciones, hubo un cuestionamiento a la forma en como Carabineros las enfrentó. Entonces, la verdad es que la alza de este año es una recuperación a este costo de imagen que tuvieron en las manifestaciones del 2011".
En ese sentido, señala que "cuando hay una crítica a la forma en cómo Carabineros enfrenta ciertos eventos, cuando se le "pasa la mano" en cuanto a la represión, eso es castigado. O sea, tampoco Carabineros puede decir que tiene un cheque en blanco para hacer lo que quiere. No, hay efectos, no es incombustible, sino que afecta a su rendimiento y por lo tanto, tienen que cuidar los temas institucionales".
Sin embargo, el general Claudio Espinoza, jefe de la Dirección de Planificación y Desarrollo de Carabineros (Diplecar), discrepa de esa visión, ya que a su parecer "no influyó la cantidad de marchas, porque si no todas las instituciones evaluadas también hubiesen subido en las encuestas. Además, los estudiantes nos tienen mucha confianza por la función de resguardo que hacemos para ellos, para que sus marchas funcionen bien".
Las razonesEn Carabineros recibieron con orgullo las cifras de la encuesta, y apuntan a que el principal motivo de la confianza de los chilenos hacia la institución es la cercanía que mantienen con la gente en la calle.
"Desde siempre hemos trabajado cerca de la gente. Muchas veces nos transformamos en médicos, asistentes sociales y otras profesiones, sin tener títulos. Queremos que la gente nos diga sus problemas, que a veces Carabineros no va a poder solucionar, pero sí buscar alternativas y eso se valora, siempre hemos estado abiertos a la sociedad y tratamos de ser lo más trasparentes posibles", dice Espinoza.
Esta visión coincide con la del sociólogo Pablo Hunneus, quien afirmó que "el chileno tiene en su ADN al paco de la esquina, o la pareja de carabineros montada a caballo que hacen la guardia, que recorren los campos. El chileno distingue la función que ha asumido esa institución de guardia nacional, que generalmente es otra cosa, a la guardia civil".
"En Estados Unidos se llama la guardia nacional, que no es la policía local. Son dos funciones completamente distintas que ha asumido Carabineros, por default, como el asunto del tránsito, que debiera ser otra policía, por ejemplo, de la función de Fuerzas Especiales, la función paramilitar dentro del territorio nacional", agrega.
Según Hunneus, si desde Carabineros no se hace una separación entre su función social de policía local y la de represión encabezada por FF.EE. puede registrarse una baja en la confianza de la gente hacia esta institución.
"Yo creo que el apoyo puede ir decreciendo en la medida en que está todo revuelto, en que las funciones tradicionales de Carabineros son sobrepasadas en imagen por su rol de guardia nacional. Incluso sugeriría un uniforme distinto, así como uno distingue a los de Tránsito por una piocha, tiene que ser una distinción total", indicó.
El intelectual agregó que si no se hace eso, "las generaciones jóvenes lo van a ir mezclando, lo único que saben de Carabineros es esto y va a entorpecer mucho la labor del paco de la esquina, el respeto a la autoridad. Si la institución se militariza y se transforma en un brazo político del orden, la ley, tanquetas y cuestiones, claro que va a ser mal visto".
En ese sentido, el general reconoce que hay una distancia entre la visión que existe sobre la acción de las FF.EE. y la de otros carabineros. Frente a ello, dice que "todos los días revisamos los protocolos para que la gente reciba a un carabinero más amable. Pero hay casos como los carabineros de FF.EE con sus implementos, hay que aclarar que esos son sólo para protección, porque tenemos que proteger a nuestra gente".
Violencia es rechazadaEn tanto, el sociólogo y académico Manuel Antonio Garretón señala que "el rechazo que hay a las actividades represivas de Carabineros con motivo de las manifestaciones, especialmente lo que ha sido desnudar a estudiantes, todo eso cuenta con un enorme rechazo de la población, y sin embargo cuando le preguntan por Carabineros piensan en la institución, no en el comportamiento, y es un referente del orden y la lucha de la delincuencia".
“No hay que confundir la confianza que hay en una institución del juicio que se hace de su comportamiento. Hay un aumento sin duda de la confianza en Carabineros y hay un juicio muy duro y muy negativo creciente sobre las actividades que ha tenido en la represión tanto en la Araucanía como con los estudiantes de los liceos", añadió.
Según Garretón, "seria muy grave que se pensara que porque hay un juicio positivo de la institución significara que se aprueba el comportamiento de los últimos meses, que cuentan con un amplio rechazo de la ciudadanía".
Esta cifra contrastó notoriamente con las acusaciones que se han realizado en las últimas semanas contra el proceder de la policía en las manifestaciones estudiantiles y las protestas mapuche en la Región de la Araucanía, factores que durante el año pasado hicieron descender el nivel de apoyo hacia la institución.
A juicio del director de Adimark, Roberto Méndez, este aumento en la confianza de Carabineros no es menor, considerando que "hemos visto que el Gobierno, la oposición, el Congreso, el Poder Judicial, la Iglesia, prácticamente no se salva nadie. Hay un proceso de desconfianza, de incredulidad en general de las instituciones y en ese sentido llama la atención justamente que Carabineros haya logrado mantenerse bastante alto".
Sin embargo, Méndez señala que los datos de la CEP "hay que leerlos con cuidado, porque en el año 2011 se había producido una baja bastante fuerte en el momento más álgido de las confrontaciones, hubo un cuestionamiento a la forma en como Carabineros las enfrentó. Entonces, la verdad es que la alza de este año es una recuperación a este costo de imagen que tuvieron en las manifestaciones del 2011".
En ese sentido, señala que "cuando hay una crítica a la forma en cómo Carabineros enfrenta ciertos eventos, cuando se le "pasa la mano" en cuanto a la represión, eso es castigado. O sea, tampoco Carabineros puede decir que tiene un cheque en blanco para hacer lo que quiere. No, hay efectos, no es incombustible, sino que afecta a su rendimiento y por lo tanto, tienen que cuidar los temas institucionales".
Sin embargo, el general Claudio Espinoza, jefe de la Dirección de Planificación y Desarrollo de Carabineros (Diplecar), discrepa de esa visión, ya que a su parecer "no influyó la cantidad de marchas, porque si no todas las instituciones evaluadas también hubiesen subido en las encuestas. Además, los estudiantes nos tienen mucha confianza por la función de resguardo que hacemos para ellos, para que sus marchas funcionen bien".
Las razonesEn Carabineros recibieron con orgullo las cifras de la encuesta, y apuntan a que el principal motivo de la confianza de los chilenos hacia la institución es la cercanía que mantienen con la gente en la calle.
"Desde siempre hemos trabajado cerca de la gente. Muchas veces nos transformamos en médicos, asistentes sociales y otras profesiones, sin tener títulos. Queremos que la gente nos diga sus problemas, que a veces Carabineros no va a poder solucionar, pero sí buscar alternativas y eso se valora, siempre hemos estado abiertos a la sociedad y tratamos de ser lo más trasparentes posibles", dice Espinoza.
Esta visión coincide con la del sociólogo Pablo Hunneus, quien afirmó que "el chileno tiene en su ADN al paco de la esquina, o la pareja de carabineros montada a caballo que hacen la guardia, que recorren los campos. El chileno distingue la función que ha asumido esa institución de guardia nacional, que generalmente es otra cosa, a la guardia civil".
"En Estados Unidos se llama la guardia nacional, que no es la policía local. Son dos funciones completamente distintas que ha asumido Carabineros, por default, como el asunto del tránsito, que debiera ser otra policía, por ejemplo, de la función de Fuerzas Especiales, la función paramilitar dentro del territorio nacional", agrega.
Según Hunneus, si desde Carabineros no se hace una separación entre su función social de policía local y la de represión encabezada por FF.EE. puede registrarse una baja en la confianza de la gente hacia esta institución.
"Yo creo que el apoyo puede ir decreciendo en la medida en que está todo revuelto, en que las funciones tradicionales de Carabineros son sobrepasadas en imagen por su rol de guardia nacional. Incluso sugeriría un uniforme distinto, así como uno distingue a los de Tránsito por una piocha, tiene que ser una distinción total", indicó.
El intelectual agregó que si no se hace eso, "las generaciones jóvenes lo van a ir mezclando, lo único que saben de Carabineros es esto y va a entorpecer mucho la labor del paco de la esquina, el respeto a la autoridad. Si la institución se militariza y se transforma en un brazo político del orden, la ley, tanquetas y cuestiones, claro que va a ser mal visto".
En ese sentido, el general reconoce que hay una distancia entre la visión que existe sobre la acción de las FF.EE. y la de otros carabineros. Frente a ello, dice que "todos los días revisamos los protocolos para que la gente reciba a un carabinero más amable. Pero hay casos como los carabineros de FF.EE con sus implementos, hay que aclarar que esos son sólo para protección, porque tenemos que proteger a nuestra gente".
Violencia es rechazadaEn tanto, el sociólogo y académico Manuel Antonio Garretón señala que "el rechazo que hay a las actividades represivas de Carabineros con motivo de las manifestaciones, especialmente lo que ha sido desnudar a estudiantes, todo eso cuenta con un enorme rechazo de la población, y sin embargo cuando le preguntan por Carabineros piensan en la institución, no en el comportamiento, y es un referente del orden y la lucha de la delincuencia".
“No hay que confundir la confianza que hay en una institución del juicio que se hace de su comportamiento. Hay un aumento sin duda de la confianza en Carabineros y hay un juicio muy duro y muy negativo creciente sobre las actividades que ha tenido en la represión tanto en la Araucanía como con los estudiantes de los liceos", añadió.
Según Garretón, "seria muy grave que se pensara que porque hay un juicio positivo de la institución significara que se aprueba el comportamiento de los últimos meses, que cuentan con un amplio rechazo de la ciudadanía".
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