Una nueva generación de satélites con radar vigila la Antártica y los volcanes

Richard García

Diario El Mercurio, Lunes 21 de Noviembre de 2011

http://blogs.elmercurio.com/cienciaytecnologia/2011/11/21/una-nueva-generacion-de-sateli.asp

Con independencia de las condiciones meteorológicas, nubes u hora del día, los satélites con tecnología radar de última generación están revelando una imagen más precisa de la Tierra.

Uno de los más avanzados es el TerraSAR X alemán, que muestra casi en tiempo real la dinámica de los hielos antárticos, un tema de especial interés para los científicos, a la luz de las modificaciones que ha sufrido la superficie polar debido al cambio climático.

Es así como gracias a las diez pasadas diarias de su antecesor, el ERS, los científicos pudieron obtener gran parte del conocimiento que poseen hoy sobre las desintegraciones de las masas de hielo alrededor de la península antártica, la reducción del espesor de los glaciares, los cambios en la línea que separan el hielo superficial y el hielo flotante, y los cambios en el agujero de la capa de ozono.

Todos estos hitos fueron recordados la semana pasada en un congreso en Punta Arenas, que conmemoró 20 años de la estación alemana de recepción satelital (GARS), que funciona junto a la Base O'Higgins en la Antártica. Desde allí se obtienen las imágenes antárticas y del cono sur capturadas por los satélites radáricos germanos y luego se envían a Europa.

Caulle al descubierto

"La capacidad de almacenamiento de los satélites no es muy grande y por eso necesitan descargar sus imágenes cada cierto tiempo", explica a "El Mercurio" Setfan Detch, director del Centro Alemán de Percepción Remota de Datos (DFD), dependiente del Centro Alemán Aeroespacial (DLR).

Detch cuenta que al principio era sólo una base de campaña donde los científicos permanecían dos meses, pero a medida que aumentaron los satélites la actividad se hizo más compleja. Hoy está casi los 365 días operativa.

La gran ventaja de esta antena es que se puede operar incluso bajo extremas condiciones de viento.

La tecnología radárica no sólo ha sido relevante para el mayor conocimiento de la Antártica. También es clave en el caso de erupciones volcánicas. Es así como las primeras imágenes del cráter generado en el Cordón Caulle tras la erupción volcánica las obtuvo el TerraSAR X. Hasta antes de eso, los expertos sólo tenían la opción de observar el volcán desde tierra a considerable distancia o durante algunos vuelos limitados. En ambos casos, la nubosidad y la lejanía complicaban hacer una evaluación clara de la situación.

Las imágenes radáricas cambiaron el escenario. "La nube de cenizas sólo obstaculiza mínimamente las señales de radar, de modo que las imágenes de TerraSAR-X permiten una vista casi libre al complejo volcánico", explicó el investigador del DLR Robert Metzig.

Detch afirma que combinado con otro satélite radárico alemán, el Tandem X -cuya misión es elaborar un modelo tridimensional de la elevación terrestre-, sería posible predecir una erupción poco tiempo antes de que tenga lugar. Esto, porque ambos satélites hacen mediciones en forma casi simultánea, pero desde distintos puntos, lo que permite detectar el levantamiento de la superficie en un rango de centímetros.

"Poco antes de que un volcán entre en erupción es posible ver cómo los gases bajo la superficie inflan el suelo. Esto puede monitorearse con los satélites y puede ser un indicador temprano de una erupción volcánica".

Alerta temprana de catástrofes

Como director del Centro Alemán de Captura Remota de datos, Setfan Detch es parte de un proyecto de alerta temprana de maremoto para Indonesia y el océano Índico. Aprovechó su visita a Chile para tomar contacto con el Servicio Hidrográfico de la Armada (SHOA) y la Onemi, con el fin de desarrollar aquí un sistema similar. El sistema del DFD toma datos a partir de diferentes sensores, compara la información, precalcula escenarios y potenciales zonas de riesgo. En menos de 10 minutos puede entregar información sobre las zonas que se deben evacuar.

"Estoy muy optimista de que lanzaremos un proyecto con el SHOA y Onemi en unos meses más, para desarrollar conjuntamente un proyecto de sistema de información de desastres naturales y ambientales", destacó. El sistema no sólo abordaría maremotos, sino también erupciones de volcanes.