Voyeurismo político

por Joe Black
Diario El Mercurio, Domingo 08 de Abril de 2012  

http://blogs.elmercurio.com/reportajes/2012/04/08/voyeurismo-politico.asp

Siempre he pensado que una mujer con muy poca ropa encima es mucho más sexy que una mujer totalmente desnuda. En dicho principio se sustenta la multimillonaria industria de la lencería.

Esa creencia es la que me hace reprobar igual el voyeurismo que el exhibicionismo. Mi reproche, en todo caso, no es ético sino estético. Cada vez que uno se asoma a la contemplación furtiva, aprovechando un resquicio, como la cerradura de una puerta o una cortina abierta, termina viendo cosas que a la larga uno lamentará haber visto.

Me ocurre lo mismo con la política.

La trastienda de la actividad política a veces puede ser tan indecorosa como los asuntos que ocurren en la intimidad de un toilette .

Comprenderán que por eso también abomino del voyeurismo político.

Y, por lo mismo, considero estéticamente absurdo el fallo del Consejo para la Transparencia que esta semana dictaminó que el ministro Cristián Larroulet debe hacer públicos 350 correos electrónicos enviados y recibidos durante tres días.

El ministro va a apelar ante los tribunales de justicia, pero si le va mal, él y cada uno de los funcionarios públicos (porque la sentencia les es extensiva a todos ellos) van a quedar totalmente desnudos ante el país.

"Guácala", diría un preescolar.

Quizás lo de Larroulet no sea tan dramático, porque hasta aquí aparece como un político con buenos hábitos de "aseo y ornato", metafóricamente hablando. Pero vaya a saber uno qué va a encontrar en la bandeja de entrada y en la de salida de otros personajes.

Yo no sé si quiero adentrarme en los mails del diputado Alinco, por ejemplo. Menos los que despachó (¡y los que recibió!) el día después de haber sido detenido por Carabineros acusado de ofensas al pudor dentro de una camioneta en Coyhaique.

Me daría terror fisgonear en el intercambio previo de mails entre Ignacio Walker y Carlos Larraín, antes de anunciarle al país su acuerdo para cambiar el sistema electoral. O los que se ha enviado el mismo Walker con el presidente del Partido Comunista a propósito del acuerdo electoral municipal.

¡Piensen un segundo en los mails que le manda el Presidente a sus ministros! ¡Cómo los retará! ¡Cómo le pedirán permiso para tomarse vacaciones! ¡Cómo se disculparán cuando meten la pata! Dios me libre de ser testigo de aquello.

Me imagino los mails escuetos de Frei, las páginas y páginas que escribirá Lagos (llenas de autorreferencias), las voladas ecologistas que difunde Girardi, el fraseo atarantado de Zalaquett, los mensajes coquetos de Fulvio, el tono golpeado de Escalona, los chistes fomes de Golborne, los reclamos de Espina, las faltas de ortografìa de MEO, los pelambres feministas de la ministra Schmidt, los berrinches de la Lily Pérez, la soporífera dialéctica de Andrade, las ideas ametralladas de Evelyn, LOS ESCRITOS TODOS EN MAYÚSCULA DE LONGUEIRA y los mails sin "asunto" (y sin "destinatario") de Bachelet.

¿Entienden a lo que me refiero?

Es que a veces, hay cosas que es mejor ni ver.