Playlist por Gustavo Santander

Hombre soltero busca 

Playlist por Gustavo Santander

Diario El Mercurio, Martes 08 de Noviembre de 2011   

http://blogs.elmercurio.com/ya/2011/11/08/playlist.asp

Como si se tratara de una carretera sinfónica o de un cover de la historia de Hansel y Gretel donde, en lugar de migas, el camino está hecho de melodías, la vida de muchos de nosotros podría estar representada como una larga lista de canciones. Eso pienso mientras hago el playlist para una fiesta que organizamos entre tres amigos, donde intentaremos reunir a un grupo heterogéneo de personas, amigos y buenos conocidos que fuimos recolectando en estos años. Todos los que vendrán superan los treinta y eso hace que estemos unidos por una historia común, una iconografía pop que reconocemos porque crecimos con ella. Y, por supuesto, una plataforma musical que nos une generacionalmente.

Hacer la lista de canciones que te gustan es una buena forma de recorrer tu vida desde una perspectiva diferente, y lo que pensé sería una tarea rápida, esta vez se ha convertido en un desafío sentimental, una carrera donde los obstáculos son los propios recuerdos que no me permiten registrar de forma automática los nombres elegidos, sino que me obliga a escuchar cada una por completo, transportándome al momento preciso donde esa canción marcó un hito en mí. Como si fueran cicatrices escondidas tras las mangas de una camisa, nuestro hipocampo -esa región del cerebro a la cual le debemos que nuestra vida no sea una llanura, sino una cordillera poblada de recuerdos- ha discriminado ciertas vivencias para darles un estatus superior, convirtiendo la memoria de corto plazo en memoria de largo plazo.

Es así como la huella que años atrás quedó en algunas de mis neuronas se reactiva estimulada por una melodía y mi cabeza comienza a revivir esa situación, muchas veces deformada por el tiempo o por mi propia capacidad de autodefensa, y otras de forma fidedigna, sin matices ni oropeles. Personalmente tengo una precaria capacidad para recordar fechas -olvido hasta los cumpleaños más importantes- o números telefónicos; pero a cambio de eso, mi cerebro se ha adiestrado para rememorar caras, frases, diálogos o temas musicales. Si cada quien está hecho de una materia diferente, imagino que mi universo mental está abarrotado en gran parte por diálogos cinematográficos, frases de libros que leí con placer o canciones que no solo grabé en casetes sino también en un recóndito lugar de mi memoria.

En "Las películas de mi vida", Alberto Fuguet construye una novela que también es una lista o una gran lista que se puede leer como si fuera una novela, pues la narración está armada en base a varias películas que, a su vez, van construyendo la vida de este personaje. Cada filme que aparece en el libro no es más que la reseña de un capítulo en la vida de Beltrán, el protagonista de la historia. Ese libro ha aparecido en mi mente mientras voy grabando en una lista de reproducción del Itunes los temas que selecciono. Un libro, una canción: ¿cuál será la densidad de los recuerdos? ¿Qué tamaño tendrá un recuerdo? "El remezón no vino de a poco. En realidad, nada viene de a poco en esta vida. Todo acaece tal como en los terremotos: de sopetón. Somos nosotros los que vivimos de a pizcas", con ese epígrafe de Ana María del Río inicia la novela. Vivir de a pizcas, de a migajas. Como si estuviese armando un puzzle de decenas de piezas voy escogiendo cada tema y distribuyéndolo en la lista para que tenga cierta armonía,
evitando que los Pixies aparezcan al lado de Gloria Gaynor.

En ese momento siento que alguien me golpea el hombro sacándome de mis pensamientos. "¡¿Cómo va esa playlist?!" me grita Álvaro como si no se diera cuenta de que ya me saqué los audífonos. "¿Tan pocos temas llevái? ¿Y ya pusiste a Soda Stereo? No vayas a poner puras tonteras pos Gustavo, queremos que la gente se divierta", me lanza haciendo un ademán de baile con las manos y tomando un sorbo de su lata de cerveza, pisoteando con cada palabra todo el rollo mental que me he estado pasando. Peor aún: me doy cuenta de que no he puesto ninguna de Soda Stereo.