Texto: Beatriz Montero Ward
Diario El Mercurio, VD, sábado 15 de febrero de 2014
Este recipiente redondo,
con asa y en ocasiones con tapa,
surgió en la antigüedad.
Es posible que haya sido diseñado
para las mujeres y se ubicaba
bajo la cama o dentro del velador.
______________________________________
Es muy probable que apenas el hombre
ideara cómo confeccionar recipientes profundos,
también descubrió que podían ser útiles
para hacer en ellos sus necesidades
durante la noche o en caso de enfermedad,
y así evitar salir a la intemperie,
el frío, la lluvia o la nieve.
A pesar de que las bacinicas
ya se usaban en Grecia en el siglo xvi a.C.
y eran, por lo general, de cerámica,
en el contexto europeo
las primeras hechas como tales
para ser utilizadas como baños
datan de 1519 y fueron fabricadas
en las colonias portuguesas en África.
En el siglo xviii formaban
parte integral de la vida cotidiana,
tanto que se estima que solo en Londres
había alrededor de 300 mil
en uso a comienzos de 1700.
Era un artículo cuyo uso
atravesaba todos los espectros sociales,
incluso los más pobres.
Por ejemplo, las bacinicas
de la clase trabajadora u obrera
solían ser de cobre,
a pesar de que más tarde
también tuvieron acceso
a aquellas de loza.
Las de los ricos, nobles
y miembros de la realeza,
en cambio, eran de plata sólida,
muy ornamentadas y pretenciosas.
Con el tiempo,
se fabricaron en variados materiales,
desde cerámica gres y greda
hasta peltre, hierro y porcelana,
dependiendo de las modas del momento.
Respecto de sus decorados,
estos recipientes redondos,
con una sola asa
y en ocasiones con tapa,
podían ser muy sencillos,
pero también en extremo sofisticados,
con decorados que iban
desde simples flores pintadas a mano
hasta paisajes y escenas.
Habitualmente se ubicaban
debajo de la cama o bien escondidas
tras la puerta inferior del velador o mesa de noche.
De su limpieza se encargaba,
en las casas de las personas
de buena situación económica,
la sirvienta que tenía la responsabilidad
de asear los dormitorios y hacer las camas.
Hacia mediados del siglo xix
con la introducción del inodoro dentro de la casa,
como parte de la sala de baño,
las bacinicas iniciaron
su lento proceso de desaparición,
culminando su existencia,
por lo menos en el ámbito de la ciudad,
alrededor de la década de 1950.
BOURDALOUE
Este tipo de bacinica
Este tipo de bacinica
de forma oblonga rectangular u ovalada,
con frente más alto,
fue diseñado específicamente para las mujeres.
Permitía orinar en cuclillas
o incluso de pie, bajo los enormes vestidos.
Luego con la ayuda
de la empleada era retirada discretamente.
Fue muy popular durante los largos viajes
en carruajes y permaneció en uso
hasta el fin de la época victoriana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
COMENTE SIN RESTRICCIONES PERO ATÉNGASE A SUS CONSECUENCIAS