Más de 300 piezas

Trazos con swing : la gran colección de dibujos musicales

El ingeniero y músico aficionado Roberto Dannemann ha retratado a los jazzistas chilenos en piezas improvisadas al minuto. Hoy tiene planes de exponer este recuento, que comenzó en 1976.  

IÑIGO DÍAZ 

Diario El Mercurio, jueves 23 de agosto de 2012

http://diario.elmercurio.com/2012/08/23/actividad_cultural/actividad_cultural/noticias/8D4FD5F4-ED2B-48C4-B0D8-5A89FB5143F0.htm?id={8D4FD5F4-ED2B-48C4-B0D8-5A89FB5143F0}

"Nunca fui buen trompetista ni cornetista. No era nada genial, pero al menos me alcanzó para introducir a mi hijo menor, Federico Dannemann, en el jazz. Ahí sí que salió un gran músico", dice el argentino Roberto Dannemann (86), ingeniero civil que llegó a Chile en 1955.

A los trece años, cuando vivía en Buenos Aires, comenzó a explorar el dibujo libre e improvisado; y a mediados de los años 70 inició una serie de retratos de músicos chilenos en su estado natural: tocando en los clubes. Hoy, esa colección suma unos 350 dibujos, de 20 x 30 cm. Él los llama sketches , es decir, bocetos.

"Cuando hay buen swing en un concierto, la mano se mueve sola. Cuando los grupos son fomes, la mano queda detenida. Hay una relación directa entre el jazz y el dibujo. La síncopa se traduce en la línea cortada. Entonces el ojo se imagina la línea que falta. Si una trompeta da una nota, usted espera que toque la que viene después, pero si el trompetista no la toca, entonces usted también estará tocando, con la imaginación. Pasa lo mismo con el dibujante", dice Dannemann.

Sus piezas están trabajadas en el lapso de un minuto, a lo sumo dos. "Lo que dura un solo", dice. Casi siempre con plumones de tinta gruesa, aunque Dannemann ha explorado en técnicas sumamente rudimentarias y eficaces, como intervenir el papel con vino para crear una especie de acuarela, o dibujar en papel negro con el viejo y querido liquid paper . "Esos dibujos en fondo negro son los que más me piden", dice.

La colección ha sido digitalizada en su totalidad. Y el próximo plan de Dannemann es exponer y vender a melómanos coleccionistas los originales de estos retratos realizados entre 1976 y 2012. "Muchas veces el músico se reconoce más por la pose que por la fisonomía. A mí me gustan los tipos con bigotes, con narices, caras con carácter. Me gusta dibujar personajes".