LOS LAZOS FORMADORES INVISIBLES v.2.0 por RRA

Cuando estábamos en el colegio
y desde muy chicos estábamos seguros
que algún día, Jorge Bande
sería presidente de la República.

Jorge ha destacado en el rubro de su especialidad,
el cobre, promoviendo la investigación y diversificación
del metal rojo y participando del Directorio
de Codelco así como, con anterioridad,
de una de sus Vicepresidencias.

Los Georgians de todos los tiempos
han ejercido los cargos de más alta responsabilidad,
descontando la Primera Magistratura:
desde la Vicepresidencia de la República
(Edmundo Pérez Yoma y José Miguel Insulza),
a diversos ministerios
(Ignacio Walker, Andrés Allamand, Álvaro García),
Vicepresidencia del Banco Central
(Manuel Marfán);
Presidencia de la Cámara de Diputados
(Patricio Melero);
Intendencias (Del Río (IVR), Trivelli (RM),
Senado (Walker, Allamand,...), Diputados (Melero, Carlos Montes,...)
Embajadas (Pérez Yoma, García,...)

----


¿Qué tienen en común (aparte de la política)
José Miguel Insulza, Edmundo Pérez Yoma,
Andrés Allamand, Ignacio Walker, Álvaro García,
Carlos Montes, Patricio Melero y Marcelo Trivelli?

¿O qué podrían tener en común personajes tan disímiles
como Andrés Pascal Allende con Michael Townley;
el inolvidable Adolfo Couve con el actor Nissim Sharim;
o personajes más conocidos que por sus propios méritos
por los ecos mediáticos de la incansable farándula,
como el abogado Hernán Calderón
y el empresario de la noche
y hermano del presidente, Miguel Piñera?

¿Qué vínculo podría establecerse
entre el artista visual Juan Downey,
los artistas plásticos Ricardo Yrarrázaval,
Benjamín Lira, Hernán Valdovinos y Ricardo Maffei;
el escultor Mario Yrarrázaval;  el director Juan Pablo Izquierdo;
los poetas Armando Uribe, Diego Maquieira y Paulo de Jolly;
los escritores Carlos Ruiz-Tagle, Antonio Avaria y José Luis Rosasco
y el crítico literario y sacerdote José Miguel Ibáñez Langlois;
el fotógrafo de la naturaleza Nicolás Piwonka, el sociólogo
y dramaturgo David Benavente, el documentalista Ignacio Agüero
el director de televisión Vicente Sabatini y el cineasta Andrés Wood?

Por último, ¿qué comparten los médicos Pablo Casanegra,
Manuel José Irarrázabal aparte de la cardiología
que ejercen en el Hospital de la UC,
o los médicos e investigadores
Fernando Orrego y Fernando Zegers
que tienen puntos de vista divergentes
respecto de, por ejemplo,
los efectos del levonorgestrel?

Aparte de la fe y de haber sido
ambos vicarios del arzobispado de Santiago,
qué otra cosa compartieron
los sacerdotes Sergio Valech y Cristián Precht;
los físicos teóricos Francisco Claro y Máximo Bañados
los empresarios Eleodoro Matte, José Luis Del Río,
Juan Hurtado y Carlos Alberto Délano?

Y podríamos seguir ad infinitum nombrando personajes:
Manuel Pellegrini, León Vial, Patricio Bañados, Agustín Huneeus,
Hermógenes Pérez de Arce, Gonzalo Rojas Sánchez, Eugenio Tironi,
los economistas Manuel Marfán, Ricardo French-Davis y Cristián Larroulet?

 Dirigentes gremiales, destacados ejecutivos y empresarios:
Fernando Agüero, Juan Claro, Rafael y Eduardo Guilisasti,  Máximo Pacheco;
los arquitectos Luis Izquierdo (Premio Nacional de Arquitectura)
Jorge Swinburn, Hernán Montealegre, Gonzalo Mardones y Gustavo Munizaga.

¿Raúl Torrealba, Miguel Laborde, Hernán Precht, Jorge Carey, Sebastián Burr,
Nicolás Luco, Jorge Biggs, Vanessa Miller, Manuela Martelli y Claudio
Orrego, padre e hijo?

Si hasta hubo un vicealmirante, compañero nuestro, Sergio Robinson Prieto,
quien por trayectoria y capacidad profesional, le fueron entregadas
las más altas responsabilidades de nuestra marina,
rol que desempeñó con su probada capacidad profesional
lo que lo hizo merecedor a integrar la quina desde donde
la Presidenta escogió al actual Comandante en Jefe de la Armada.

Y la lista está recién empezando...
todos ellos estuvieron matriculados
en algún momento en el Saint George's College.

Y eso que casi ninguno de ellos
(exceptuando a Manuela Martelli, Vanessa Miller,
Andrés Wood,  Claudio Orrego hijo y Max Bañados)
pertenecen a generaciones más bien recientes,
las de las últimas dos o tres décadas.

La mayoría egresaron hace más de 35 años,
 cuatro, cinco y hasta seis décadas han pasado
desde que se graduaron o abandonaron el colegio;
es por ello que a excepción de Vanessa Miller
y Manuela Martelli, no aparecen mujeres.

El colegio paulatinamente se convirtió en mixto
recién a partir de los comienzos de los años setenta.

Tal vez más de alguien cuestionará
la calidad de ex georgeans
de algunos de los próceres mencionados,
apelando a Wikipedia u otra fuente en internet
para aseverar sus cuestionamientos.

Es posible que más de un nombrado
haya casi olvidado
su fugaz paso por el Saint George
como Nissim Sharim.

El dato me lo dio hace como veinte años,
alguien que sabe más que nadie:
Joe Dorsey, C.S.C., que formó
y desarrolló por más de dos décadas
el archivo del colegio.

Estos nombres mencionados
ciertamente no constituyen
ni pretenden un panteón
que aspire a la completitud;
fueron escritos al vuelo
de la memoria y breves consultas;
no contemplan a valiosos profesionales
y personas que han desarrollado
magníficas e incluso heroicas obras,
conocidas en su ámbito de acción
sin haber trascendido mayormente
al gran público.

La revisión, por lo demás
fue tan vertiginosa
que pasé por encima
de muchos nombres conocidos
para los medianamente informados
-y otros que, por razones personales
o lazos familiares o de amistad lo son para mí-

Entre los olvidados hay varios
que fueron o son famosos, entre los primeros,
actores como Rafael Benavente y Juan Pablo Donoso
que las nuevas generaciones tal vez no han escuchado.

Falta que los que han pasado en décadas
más recientes por el Saint George's
nos cuenten en los campos en que han
incursionado sus pares más destacados.

Seguro que la impronta georgeana
sigue tan viva como el fuego del dragón...

ADDENDUM

¿Alguien sabe que Jorge López Sotomayor
fue el que a comienzos de la década del setenta
montó Jesucristo Superestrella
cuando no tenía más de veinte años?

¿Que se dio el lujo de filmar en la década siguiente
la novela de Francisco Coloane que leíamos en el colegio
El Último Grumete de la Baquedano?

¿Qué continuó filmando y fue uno de los pilares
de la serie Visiones del Canal 13?

Que sorprendió a Alejandro Jodorowsky
al susurrarle por la espalda en un lugar
de la costa oeste de Estados Unidos:
¿No te gustaría comerte una empanadita?

¿Que hace un par de años,
por compromisos en Santiago
no pudo asistir al Festival de Cannes
en que se presentaba uno de sus films?

Que ahora crea unos maravillosos vitrales
y que aparte de continuar realizando
todo tipo de proyectos, fascina
a su nieto con sus historias
y con su entusiasmo y alegría de vivir?

¿Alguien sabe que el gran Nacho Mena,
tocó el año pasado en Boston
en el Berklee College of Music,
o que en los años setenta
se fue de gira por Europa
con la leyenda del jazz
Ornette Coleman
y que éste le quedó debiendo
parte de los honorarios?

Y no he nombrado a tantos,
de mi curso a Jorge Bande,
a Raúl Williams, a Fernando Figueroa,
a Carlos Cabezón, a Lorenzo Gazmuri,
a Bernardo Urquieta, a Ricardo Yazigi...
y no he terminado.

Pero no puedo cargar demasiado
la mano hacia la clase del '70
porque las demás generaciones
tienen mucho que mostrar también.

Me gustaría recordar solamente
a Raúl «Chirulo» Rioseco,
quién hasta poco antes
de su temprano fallecimiento en Santiago,
pasó alrededor de tres décadas en la Amazonía.

Ciertamente allí no estaba
incrementando su currículum,
sino que conviviendo
con aborígenes, de igual a igual,
estaba no sólo en un hábitat
que es probablemente
la antítesis de lo que eran
los peladeros y patios
del colegio de Pedro de Valdivia.

Allá, Chirulo podía ser el mismo
en toda su espontánea riqueza
y vivir la vida con una sencillez extrema
y al mismo tiempo en medio
de una exuberancia no exenta de peligro
al estar permanentemente expuesto
a los elementos y al mundo salvaje.

Pudo así experimentar la vida
en la multiplicidad de sus dimensiones,
una libertad muy exigente
pero que le permitió experimentar
posibilidades nuevas e inéditas para él
sin caer en la trampa con que nuestra
civilización nos seduce y a la vez encadena.

Su afán por alcanzar
la plenitud existencial
trascendiendo el espacio-tiempo,
tal vez no la alcanzó a encontrar
en la selva, sino que ahora,
ya liberado de las ataduras corporales,
la vida completa su círculo
y nuestro querido Chirulo
encuentra respuesta a todas sus inquietudes
en la persona misma de Jesús
-camino, verdad y vida-
y que recibió sacramentalmente
por primera vez cuando muy niño,
en una mañana de octubre de 1960
en la misa al aire libre de Primera Comunión,
celebrada en la cancha de tenis
del colegio Saint George de Pedro de Valdivia.

Es por ello que intuyo que si
se escribiera la historia de los georgeans
con lujo de detalles, podríamos poner en aprietos
la capacidad de almacenamiento de The British Library...

LAST BUT NEVER LEAST

Un homenaje a los sacerdotes, misses, profesores, administrativos, auxiliares
y a todos los alumnos y ex alumnos georgeanos.

Dios los bendiga siempre, en sus alegrías y sus penas,
en sus esfuerzos y los fortalezca en momentos de debilidad.
Por sus familias, seres queridos y en sus afanes
y enfrentando dificultades de toda índole.

No teman, ni al rechazo, ni al fracaso, ni al ocaso.

Es por eso que el lema del colegio es:
Recte ad ardua : Derecho a lo difícil

In God we Trust