Señor director:
Celebramos la firma del acuerdo entre el gobierno, la Nueva Mayoría y la oposición. Pese a la premura, las autoridades fueron capaces de debatir seriamente un tema de gran impacto social y dejar a un lado las diferencias, presiones e ideologías.
No hay otro modo de avanzar hacia un mayor progreso si no es con el esfuerzo conjunto y complementario del Estado, el sector privado y la sociedad civil. La unidad, más allá de las diferencias, ha probado ser en otros países la fórmula para democracias y economías sólidas y estables. Las crisis políticas impactan a la economía, haciendo caer en círculos viciosos difíciles de romper. La libertad económica es sólo un aspecto de la libertad humana. Cuando las personas son capaces de renunciar a parte de sus intereses, experimentan el ejercicio más pleno e integral de la libertad. Porque ésta sólo es auténtica cuando se orienta al bien común, en oposición al bien particular o de un grupo.
Este acuerdo es un buen primer paso para restaurar la confianza y retomar la senda de la democracia de los consensos; corregir las distorsiones y disminuir las brechas con el concurso de todos, para por dar el salto al desarrollo que tanto hemos soñado. Eso sí, esta vez, un desarrollo que incluya a todos.
José Antonio Garcés
Presidente Unión Social de Empresarios Cristianos (Usec)
Celebramos la firma del acuerdo entre el gobierno, la Nueva Mayoría y la oposición. Pese a la premura, las autoridades fueron capaces de debatir seriamente un tema de gran impacto social y dejar a un lado las diferencias, presiones e ideologías.
No hay otro modo de avanzar hacia un mayor progreso si no es con el esfuerzo conjunto y complementario del Estado, el sector privado y la sociedad civil. La unidad, más allá de las diferencias, ha probado ser en otros países la fórmula para democracias y economías sólidas y estables. Las crisis políticas impactan a la economía, haciendo caer en círculos viciosos difíciles de romper. La libertad económica es sólo un aspecto de la libertad humana. Cuando las personas son capaces de renunciar a parte de sus intereses, experimentan el ejercicio más pleno e integral de la libertad. Porque ésta sólo es auténtica cuando se orienta al bien común, en oposición al bien particular o de un grupo.
Este acuerdo es un buen primer paso para restaurar la confianza y retomar la senda de la democracia de los consensos; corregir las distorsiones y disminuir las brechas con el concurso de todos, para por dar el salto al desarrollo que tanto hemos soñado. Eso sí, esta vez, un desarrollo que incluya a todos.
José Antonio Garcés
Presidente Unión Social de Empresarios Cristianos (Usec)
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