Rolf Lüders
Diario El Mercurio, Viernes 22 de Julio de 2011
Diario El Mercurio, Viernes 22 de Julio de 2011
http://blogs.elmercurio.com/columnasycartas/2011/07/22/soy-un-bien-de-consumo-1.asp
Señor Director:
Señor Director:
Cristián Warnken nos comunicó ayer que él era un bien de consumo. Por supuesto que se estaba mofando de la ampliamente difundida declaración del Presidente Piñera. Es más, los dichos del Presidente produjeron rechazo generalizado y se asociaron al debate del lucro en la educación. El mismo Warnken sostiene que: "Hay dimensiones humanas en las que todavía impera la gratuidad y no campea el pensar calculante".
La reacción frente a las expresiones del Presidente deja en evidencia que los economistas hemos sido absolutamente incapaces de transmitir adecuadamente nuestra metodología. En efecto, no conozco a ningún economista que corresponda a la caricatura que Warnken hace implícitamente de nosotros en su columna.
En particular, los bienes se pueden definir como todo aquello que es apto para satisfacer una necesidad humana, lo que obviamente incluye bienes no materiales tales como la educación, la salud y el arte. Más importante, la demanda por bienes no sólo depende de factores económicos, sino por supuesto también de aquellos de carácter espiritual. En el caso de la oferta de bienes, la concepción es similar. Por ejemplo, un profesor universitario lo será principalmente porque siente vocación por ello, a pesar de que factores económicos también juegan normalmente un rol.
Sin embargo, en el margen y en el agregado, la variación de precios, por ejemplo, que es muchísimo más factible en el corto y mediano plazo que el cambio de valores espirituales, tiene poderosos efectos sobre la asignación de recursos. Ello permite el diseño de políticas públicas adecuadas para satisfacer efectivamente las demandas sociales existentes. Este es un hecho empírico y nada tiene que ver con la visión del hombre que pueda tener un poeta como Warnken o un humilde economista como el que escribe.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
COMENTE SIN RESTRICCIONES PERO ATÉNGASE A SUS CONSECUENCIAS