La maldición del Transantiago
"¿El viernes 14 fue la peor crisis? ¿El año 2014 ha habido la mayor frecuencia de fallas? ¿Con 1.400 buses debutó el Transantiago? ¿Un 14 de mayo fue la primera gran protesta?... ¡Dios mío! ¡El 14 es el número de la maldición!..."
En noviembre de 1922, hace casi exactamente 92 años, egiptólogos ingleses descubrieron la tumba de Tutankamón. Lo que vino después fueron solo desgracias para todos los que tuvieron que ver con el hallazgo. Incluso los involucrados en la filmación de la película sobre el acontecimiento sufrieron penurias o incluso la muerte. Hay quienes señalan que hubiese sido mejor que nunca se intentara la empresa de desenterrar al faraón niño.
No pude dejar de pensar en eso el pasado viernes 14, cuando el metro sufrió la peor crisis de su historia. El problema es que ya ha tenido cuatro fallas graves este año 2014.
¿Qué diablos pasa con nuestro querido metro; el mismo que fue nuestro orgullo, el que permitía que los santiaguinos nos sintiésemos ciudadanos de clase mundial?
Mi teoría es que el estado actual en que se encuentra el metro es culpa del Transantiago. Este tristemente célebre sistema debutó el 1 de febrero de 2007 con 1.400 buses, menos de un tercio de la flota que existía antes. ¿Qué ocurrió? La gente se volcó masivamente al metro para desplazarse. Tres semanas después el ferrocarril metropolitano alcanzó un total de 1.439.703 viajes, el más alto de su existencia, en un mes lento como febrero.
Se apareció marzo y el sistema entró en crisis. La gente se comenzó a indignar primero y a poner agresiva después, hasta que el 14 de mayo, cuando la estación Las Rejas debió cerrarse debido a la alta demanda, estalló la primera gran protesta que obligó a la intervención de Carabineros.
Para qué voy a profundizar en todo el vía crucis que vino después. Problemas financieros, logísticos y... políticos. Hay quienes sostienen que por culpa del Transantiago la Concertación perdió el poder el año 2010 y terminó muriendo en manos de la Nueva Mayoría.
Asumió el gobierno de Sebastián Piñera y las cosas no mejoraron. Continuaron los problemas económicos del sistema, el malestar de la gente y la mala evaluación en las encuestas.
Se pensó que la situación se solucionaría si se tomaba una decisión drástica: hacer que el metro, con su impecable modelo de gestión, tomara el control administrativo y logístico del AFT (entidad a cargo del Transantiago).
Y así ocurrió. A partir del primer día de 2014, el metro controla el Transantiago.
Pero qué creen, el Transantiago contagió al metro con su peste.
A ver, momento, wait . ¿El viernes 14 fue la peor crisis? ¿El año 2014 ha habido la mayor frecuencia de fallas? ¿Con 1.400 buses debutó el Transantiago? ¿1.439.703 viajes fue el peak para el metro? ¿Un 14 de mayo fue la primera gran protesta? ¿El año 2014 el metro tomó el control del AFT?
¡Dios mío! ¡El 14 es el número de la maldición del Transantiago!
Me temo, amigos, que no podemos esperar nada muy bueno, al menos en lo que se refiere a "implementación de nuevas políticas públicas", durante este año. Quizás esto explique tantas cosas. Yo no soy supersticioso, pero voy a empezar a dormir con la luz prendida.
No sé ustedes.
No pude dejar de pensar en eso el pasado viernes 14, cuando el metro sufrió la peor crisis de su historia. El problema es que ya ha tenido cuatro fallas graves este año 2014.
¿Qué diablos pasa con nuestro querido metro; el mismo que fue nuestro orgullo, el que permitía que los santiaguinos nos sintiésemos ciudadanos de clase mundial?
Mi teoría es que el estado actual en que se encuentra el metro es culpa del Transantiago. Este tristemente célebre sistema debutó el 1 de febrero de 2007 con 1.400 buses, menos de un tercio de la flota que existía antes. ¿Qué ocurrió? La gente se volcó masivamente al metro para desplazarse. Tres semanas después el ferrocarril metropolitano alcanzó un total de 1.439.703 viajes, el más alto de su existencia, en un mes lento como febrero.
Se apareció marzo y el sistema entró en crisis. La gente se comenzó a indignar primero y a poner agresiva después, hasta que el 14 de mayo, cuando la estación Las Rejas debió cerrarse debido a la alta demanda, estalló la primera gran protesta que obligó a la intervención de Carabineros.
Para qué voy a profundizar en todo el vía crucis que vino después. Problemas financieros, logísticos y... políticos. Hay quienes sostienen que por culpa del Transantiago la Concertación perdió el poder el año 2010 y terminó muriendo en manos de la Nueva Mayoría.
Asumió el gobierno de Sebastián Piñera y las cosas no mejoraron. Continuaron los problemas económicos del sistema, el malestar de la gente y la mala evaluación en las encuestas.
Se pensó que la situación se solucionaría si se tomaba una decisión drástica: hacer que el metro, con su impecable modelo de gestión, tomara el control administrativo y logístico del AFT (entidad a cargo del Transantiago).
Y así ocurrió. A partir del primer día de 2014, el metro controla el Transantiago.
Pero qué creen, el Transantiago contagió al metro con su peste.
A ver, momento, wait . ¿El viernes 14 fue la peor crisis? ¿El año 2014 ha habido la mayor frecuencia de fallas? ¿Con 1.400 buses debutó el Transantiago? ¿1.439.703 viajes fue el peak para el metro? ¿Un 14 de mayo fue la primera gran protesta? ¿El año 2014 el metro tomó el control del AFT?
¡Dios mío! ¡El 14 es el número de la maldición del Transantiago!
Me temo, amigos, que no podemos esperar nada muy bueno, al menos en lo que se refiere a "implementación de nuevas políticas públicas", durante este año. Quizás esto explique tantas cosas. Yo no soy supersticioso, pero voy a empezar a dormir con la luz prendida.
No sé ustedes.
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