OSX Yosemite & OS 8. Éste es un Apple diferente que busca adaptarse al uso que sus usuarios están dando a sus equipos en lugar de imponer revoluciones no siempre necesarias‏

AXEL CHRISTIANSEN, DIARIO LA TERCERA, SÁBADO 7 DE JUNIO DE 2014HTTP://VOCES.LATERCERA.COM/2014/06/07/AXEL-CHRISTIANSEN/FRONTERAS-DIFUSAS/

Fronteras difusas

Para el seguidor más consumista de Apple, los anuncios realizados durante la reciente Conferencia de Desarrolladores realizada en San Francisco, Estados Unidos, puede que no hayan despertado mucho interés. Pero mientras el bolsillo de los usuarios respira ante la ausencia de dispositivos nuevos, al menos hasta la llegada de la primavera chilena, la comunidad de desarrolladores que estuvo en el Moscone Center sacó cuentas alegres.

La presentación de Yosemite y iOS 8 -los nuevos sistemas operativos para computadores y móviles, respectivamente- bien podría haberse resumido en una sola muestra, dada la gran cantidad de similitudes y características compartidas entre sí. Y eso no es algo malo, sino todo lo contrario, ya que por primera vez y de manera categórica, Apple está mandando el mensaje de que la computación no está pasando por una etapa en la que hay que optar por un móvil o un computador, sino que ambas experiencias se complementan.

Craig Federighi, el carismático ejecutivo de la compañía que ofició como presentador y motor de prácticamente todo el evento, resumió este concepto en la palabra “continuidad”, que alude a la manera en la que hoy trabajamos utilizando diferentes herramientas: hacemos algo en un lugar, lo terminamos en otro y, si es necesario, lo repasamos y afinamos en uno totalmente diferente.

Puede decirse que, a nivel de innovación, un disco duro virtual compartido o un sistema que usa tu computador como altavoz para el teléfono no implican la reinvención de la rueda. De hecho, ni OSX Yosemite ni iOS 8 apuestan a ser más que actualizaciones de sistemas actualmente probados. Pero este es un Apple diferente que busca adaptarse al uso que sus usuarios están dando a sus equipos en lugar de imponer revoluciones no siempre necesarias.

La duda sobre qué tan bien vaya a funcionar el concepto en la vida real queda siempre en duda: ¿Me obligará esto a renovar con más frecuencia mis equipos para que la comunicación entre ellos sea óptima? ¿será la nube de Apple necesariamente mejor a las nubes que ya operan? Pero lo cierto es que la compañía ya tiró sus dados y en esta industria a veces no es necesario ver el el número para declararte ganador.