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El pasado en la mirada de los Balmes Barrios

por Marilú Ortiz de Rozas
Diario El Mercurio, Sábado 04 de Agosto de 2012

Vuelven a reunirse en una exposición los Balmes Barrios, esta familia de pintores que comparte escena y vida. Gracia y José se conocieron en la Escuela de Bellas Artes, siendo aún colegiales. Hoy, a sus 85 años, suelen ir hilvanando las frases a dos voces. "Siempre hemos pintado juntos, y nuestra hija también tiene su casa y su taller aquí, aparte, en medio del jardín", revelan. En esta gran casona ñuñoína rodeada de árboles frondosos, se asienta su mundo. "Aquí se quedaron mi padre y la madre de Gracia, cuando nos tuvimos que ir al exilio", recuerda José con emoción.

Esta nueva exposición, que retoma momentos importantes de su trayectoria, revive en él episodios trágicos, como aquella mañana en que su padre lo instó a pedir asilo. "El día antes de su muerte, Víctor Jara vino a visitarme, le hice unos dibujos, pasamos una tarde muy agradable. Cuando supimos de su terrible asesinato, mi padre entró corriendo a mi taller, rompió los dibujos y me dijo 'usted se va inmediatamente a la embajada de Francia', y eso hicimos", rememora.

Las paredes de su casa están impregnadas de momentos dolorosos y alegres, plasmados en sus pinturas, en las de los numerosos amigos, y en una bandera republicana española que alguien dejó de regalo, que cuelga en el salón y habla de luchas pasadas, tan presentes. "En esta casa hemos sido tan felices", resumen.

Por su parte, Concepción incursiona en la mitología mapuche, hurgando en sus raíces chilenas. "Pertenezco a una generación que está conectada con el reconocimiento de las culturas ancestrales, y con lo importante que es su mirada, para el futuro", revela la artista. Para éstas, explica Concepción, el pasado no está detrás, sino delante de cada uno, porque es lo que podemos ver. Por ende, podemos aprender de él. En cambio, el futuro está a nuestras espaldas.

La obra que exhibirá alude específicamente al mito de las serpientes Kai Kai y Tren Tren, que representa la pugna entre el agua y la tierra, entre el mar y los cerros, y que justifica sismos, maremotos, inundaciones. "Intentando alejarse de Kai Kai y de la amenaza de las aguas, las tierras subirán más y más hacia el cielo. Así lo registra la primera versión del mito, relatado por el cronista jesuita Diego de Rosales", revela.

Inmersa en esta cosmovisión y en el cromatismo mapuche, incluso reproduce en una obra la trama de sus tejidos tradicionales. Narra en una secuencial no literal el encuentro entre Kai Kai y Tren Tren, el agua entrando en las moradas, luego el abrazo en las rocas. "Éste alude a una pareja que, según la leyenda, es la única que se salva porque se refugia en una grieta y todos los mapuches descienden de ella. La serie concluye con 'Después del diluvio'".

Algunas de las obras son abstractas, muy expresivas al momento de sugerir la interacción de los elementos, otras incluyen figuración, como la pareja mítica. Una muestra que representa un vuelco en su obra, "pero que alude a temáticas que me han interesado siempre", afirma Concepción.

La exposición "Balmes Barrios Balmes", que contó con la curatoría de Carlos Navarrete, estará abierta hasta el 1 de septiembre, y cada artista presentará cuatro obras de gran formato.