La Agonía del Órgano
por Miguel Castillo Didier
Sección Cartas al Director
Diario El Mercurio, viernes 18 de mayo de 2012
El profesor Miguel Letelier Valdés,
compositor, organista y músico destacadísimo,
tiene toda la razón desde la primera
a la última línea de su carta
a 'El Mercurio'del 16 de marzo.
Lo que no ocurre en ningún país culto del mundo
sucede en Chile; el abandono absoluto del órgano,
de un instrumento que forma parte
del patrimonio cultural y artístico.
La errada interpretación
de una disposición del Concilio Vaticano II,
que precisamente reafirmó el valor del órgano
como el instrumento sagrado por excelencia,
hizo que la mayoría de los eclesiásticos
pensaron que había llegado la hora
de "echar por la borda"
el vasto tesoro de la música sacra.
¡Qué triste es ver el abandono
del instrumento rey
tanto por la Iglesia como por el Estado!
La inmensa mayoría de los órganos del país
permanecen mudos y no hay ni una
sala de conciertos dotada de ese instrumento,
por la cual queda excluida de toda programación
la riquísima y vastísima literatura musical,
en la que el órganoparticipa como solista acompañante
o integrante de conjuntos instrumentales varios.
Duele saber que estamos impedidos,
salvo en muy pocos lugares del país,
de recibir el mensaje de paz y espiritualidad
que entrega el órgano,
"esa catedral sonora que proclama eternidad".
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