"Es relevante la actitud que ha tenido Obama frente al Islam en esta crisis"

Ernesto Ottone, ex asesor de Lagos y director de la cátedra Globalización y Democracia en la UDP:


El intelectual -que acaba de lanzar su libro "Gobernar la globalización"- analiza las acciones del gobierno norteamericano tras el abatimiento de Bin Laden.  
g.p. 
Ernesto Ottone, ex asesor del segundo piso del Presidente Lagos y actual director de la Cátedra Globalización y Democracia de la Universidad Diego Portales, ha seguido con interés lo ocurrido con Osama Bin Laden y el gobierno de Estados Unidos. Y, precisamente, esta semana lanzó su libro "Gobernar la globalización", en el que critica teorías como la de Huntington sobre el "choque de civilizaciones" y propone construir "un nuevo equilibrio de poder, con más espacio para la paz, el pluralismo y la diversidad".
-¿Qué lecciones se pueden sacar en términos del tema de la globalización en lo ocurrido con Estados Unidos y la muerte de Osama?
-Es relevante la actitud que ha tenido Barack Obama frente al Islam en esta crisis porque, al revés de Bush, se basa en el discurso de El Cairo, que es una actitud más abierta. Deja en claro que 'yo no estoy en guerra contra el Islam, yo estoy persiguiendo a un terrorista con nombre y apellido'. Y lo logró. Bush, en cambio, hizo dos guerras. La orientación de Obama ha tenido cuidado respecto al multilateralismo.
-Sin embargo, hay hechos que han causado polémica, como cuando se habla de que el cuerpo de Bin Laden fue lanzado al mar.
-Creo que tenemos todavía muy poca información al respecto. Es difícil hacer una interpretación en ese sentido. Lo que creo que hay que considerar en este momento es la actitud política que va a tener Estados Unidos en el futuro, y también Europa. Porque existe el riesgo de las posiciones xenófobas, nacionalistas, que culpan de sus problemas al que es distinto, al diferente, al que se viste de otra manera, etc. La negación del otro es el principal problema para el respeto a las identidades. Y la solución tampoco es tener comunidades separadas, con un bajo nivel de integración en el que se pierde una ciudadanía en común. Entonces, habrá que formular alternativas nuevas y un multilateralismo distinto al que se creó previo a la globalización.
-Pensando en la situación de Medio Oriente y el respeto a la identidad, más allá de este hecho, ¿qué medidas deberían adoptarse ahora?
-El fenómeno nuevo que existe es el abatimiento de Bin Laden, pero el fenómeno fuerte es la situación que está apareciendo en Medio Oriente y en el norte de África, como lo ocurrido en Egipto... En ese sentido, yo llamaría a la prudencia más grande a EE.UU., para que genere el espacio a la rebelión árabe en función de la democracia. Dejar el espacio para una transformación de fondo. Sin la globalización, sin internet, no habría podido prender ese movimiento que después, naturalmente, adquiere fuerza con el sacrificio de la gente.
-Pero uno de los problemas que se suelen plantear son las agudas diferencias culturales que pueden acrecentar la violencia...
-Creo que hay que tender a un conjunto de valores universales que yo he llamado "acumulación de civilización". Es decir, aquellas prácticas históricas que han demostrado ser buenas, ser válidas, perdurar en el tiempo y mejorar la calidad de vida.