Ruiditos | ||
Diario El Mercurio Revista Sábado, 14 de junio de 2014
Pasar tiempo en grupos
(oficina, clases)
requiere manejar dos hilos simultáneamente: el primero
es el de la responsabilidad
en las conductas personales
y el otro, la tolerancia.
Si logra controlar ambos,
usted es parte del sistema.
Pero ojo, un ruidito
es suficiente para dejarlo afuera.
1. La musicalidad es un don,
pero ningún ser humano
merece soportar a alguien a su lado
silbando, tarareando, tamborileando
o, peor aún, murmurando
una canción una y otra vez.
Usted, además de contaminar el ambiente
con algo que a nadie le interesa escuchar,
trata de demostrar lo feliz y relajada que es su vida.
Y todos sabemos que es mentira.
2. Si usted sufre
del "síndrome de las piernas inquietas",
esa especie de movimiento
sostenido e incontrolable
que hace que sus piernas zapateen solas
cuando usted está sentado,
sepa que ese sutil martilleo
puede volver loco a alguien.
Peor aun si las suelas de sus zapatos
están viejas y agregan al golpeteo un crujido.
3. Ojo con el "tirurín" del WhatsApp.
Si sus mensajeos además
van acompañados de risitas,
podrían terminar
con su smartphone en la basura.
4. Si no va a rematar
en un acto espontáneo de generosidad,
evite hacer crujir el papel de la galleta
o el chocolate que se va a comer.
|
▼
No hay comentarios:
Publicar un comentario
COMENTE SIN RESTRICCIONES PERO ATÉNGASE A SUS CONSECUENCIAS