¿Maduro, podrido, corrupto, cadáver en descomposición?‏

GUILLERMO RAMÍREZ, DIARIO LA TECERA, MIÉRCOLES 5 DE MARZO DE 2014HTTP://VOCES.LATERCERA.COM/2014/03/05/GUILLERMO-RAMIREZ/EL-PEOR-ANO-DEL-CHAVISMO/

El peor año del chavismo

Ha pasado un año y las dudas acerca de las circunstancias de la muerte de Chávez han ido en aumento en vez de disiparse. La versión oficial indica que Hugo Chávez murió en La Habana el 5 de marzo de 2013 y que sus restos fueron trasladados a Venezuela para los actos fúnebres de rigor. Por esos días se informaba, además, que el cuerpo sería embalsamado para que las generaciones venideras pudieran contemplar la figura del comandante, tal como hicieron los rusos con el cuerpo de Lenin, que ya lleva 90 años de exhibición en el mausoleo de la Plaza Roja.

Sin embargo, la versión oficial ha sido cuestionada. El sacerdote José Palmar -hombre muy cercano a Chávez, que decidió abandonar el chavismo luego del cierre de RCTV en 2007- afirma que Chávez murió el 12 de diciembre de 2012 a las 12.40 horas, en La Habana. El sacerdote asegura que la información la recibió y la confirmó con los edecanes de palacio y con los propios familiares de Chávez. Sin embargo, el entonces vicepresidente Maduro se negó a hacer oficial la información para no afectar las elecciones de gobernadores y diputados que se celebrarían cuatro días después.

Así las cosas, se tomó la decisión de no desconectar el cuerpo sin vida del presidente, lo que finalmente ocurrió el 30 de diciembre a las 5.45 de la madrugada. Durante dos meses la información se mantuvo oculta, hasta que el 5 de marzo de 2013 Raúl Castro amenazó a Maduro: “si no lo informas tú, lo digo yo”. Así, Maduro hizo oficial la información el mismo día y dio inicio a los homenajes y oficios fúnebres.

Sin embargo, el ataúd que supuestamente contenía los restos de Chávez, y que fue paseado por Caracas, estaba vacío. El cuerpo nunca se mostró, porque estaba en La Habana, donde se encuentra hasta hoy. De acuerdo con los opositores, el cuerpo y el único informe forense -que está en poder de La Habana- son los medios con los que los Castro mantienen control sobre Maduro.

Es indudable que la crisis venezolana tiene varias causas. Se suelen mencionar la inseguridad y la situación económica como las principales, pero éstas también existían cuando gobernaba Chávez. Maduro, al caer bajo la sospecha de que ha mentido desde la muerte del comandante, no goza de la indispensable credibilidad que sí poseía su antecesor. Esto se ve agravado por las razonables dudas que existen acerca de las elecciones que llevaron a Maduro al poder y que la oposición -incluidos los más moderados- han catalogado de fraude electoral.

El error final de Maduro fue la forma en que enfrentó las primeras protestas estudiantiles que se iniciaron el 12 de febrero, lo que obligó a la parte de la oposición -que rechazaba las marchas- a plegarse a ellas. Con el uso desproporcionado de la fuerza, con más de una decena de manifestantes muertos y con el cierre de los medios de comunicación que informaban estos hechos, Maduro logró que la oposición se uniera y que los estudiantes asumieran el compromiso de seguir con las movilizaciones hasta que Maduro deje el poder.

La crisis es de desenlace incierto. Y ni la economía, la seguridad, y mucho menos la credibilidad de Maduro parecen repuntar como para ponerle fin.