Publicado 20:39 h. 18-10-2010
Keith Richards quitó una cuerda a su guitarra y la afinó para adaptarla con el objetivo de que los Rolling Stones, la banda de la que forma parte desde 1962, no sonaran "como todos los demás", publica hoy "The Times".
Según Richards, estos reajustes fueron el origen del característico sonido del grupo que lidera Mick Jagger y que ha inmortalizado temas como "(I Can't Get No) Satisfaction". El guitarrista británico confesó que, excepto en sus inicios, cuando quería que su música se pareciera a la de Scotty Moore o Chuck Berry, siempre buscó diferenciarse.
"Siempre he querido comprobar qué es lo que el piano o la guitarra puede enseñarme", comentó Richards, quien afinó su guitarra tomando como referencia la nota sol, un truco que le enseñó el guitarrista estadounidense Ry Cooder. Richards empezó a experimentar entonces con la afinación abierta y decidió que, como no usaba la cuerda inferior de la guitarra, era mejor quitarla y empezó a utilizar instrumentos realizados a propósito para sus necesidades: con solo cinco cuerdas.
Con estos cambios, en palabras del propio Richards, "se limpia el revoltijo de sonido de las guitarras eléctricas y se crea un tono de fondo constante". "Cambias una sola cuerda y, de repente, tienes todo un universo nuevo bajo tus dedos. Tienes que repensarlo todo, como si un piano se diera la vuelta completamente y las teclas blancas fueran negras y al revés. Quedé fascinado porque tenía la posibilidad de volver a aprender a tocar la guitarra, como si fuera un instrumento diferente", explico el Rolling Stone.
Richards explicó que el instrumento resultante es similar a una especie de banjo con cinco cuerdas que se utiliza en el África occidental y afirmó que al escuchar composiciones de Mozart o Vivaldi se puede apreciar cómo estos compositores utilizaban el recurso de dejar una nota en suspenso cuando no correspondía, "lo que hace que un cuerpo muerto se convierta en una hermosa criatura viva". Canciones como "Start Me Up", "Can't You Hear Me Knocking" y "Honky Tonk Woman" fueron creadas con este recurso.
Fuente: EFE
Según Richards, estos reajustes fueron el origen del característico sonido del grupo que lidera Mick Jagger y que ha inmortalizado temas como "(I Can't Get No) Satisfaction". El guitarrista británico confesó que, excepto en sus inicios, cuando quería que su música se pareciera a la de Scotty Moore o Chuck Berry, siempre buscó diferenciarse.
"Siempre he querido comprobar qué es lo que el piano o la guitarra puede enseñarme", comentó Richards, quien afinó su guitarra tomando como referencia la nota sol, un truco que le enseñó el guitarrista estadounidense Ry Cooder. Richards empezó a experimentar entonces con la afinación abierta y decidió que, como no usaba la cuerda inferior de la guitarra, era mejor quitarla y empezó a utilizar instrumentos realizados a propósito para sus necesidades: con solo cinco cuerdas.
Con estos cambios, en palabras del propio Richards, "se limpia el revoltijo de sonido de las guitarras eléctricas y se crea un tono de fondo constante". "Cambias una sola cuerda y, de repente, tienes todo un universo nuevo bajo tus dedos. Tienes que repensarlo todo, como si un piano se diera la vuelta completamente y las teclas blancas fueran negras y al revés. Quedé fascinado porque tenía la posibilidad de volver a aprender a tocar la guitarra, como si fuera un instrumento diferente", explico el Rolling Stone.
Richards explicó que el instrumento resultante es similar a una especie de banjo con cinco cuerdas que se utiliza en el África occidental y afirmó que al escuchar composiciones de Mozart o Vivaldi se puede apreciar cómo estos compositores utilizaban el recurso de dejar una nota en suspenso cuando no correspondía, "lo que hace que un cuerpo muerto se convierta en una hermosa criatura viva". Canciones como "Start Me Up", "Can't You Hear Me Knocking" y "Honky Tonk Woman" fueron creadas con este recurso.
Fuente: EFE
En palabras del propio
ResponderEliminar(y gran) Keith Richards:
"All you need is
five strings,
three chords
and one asshole".