LAS PROEZAS DEL VIEJO PASCUERO por AC.

De los dos mil millones de menores de 18 años,
descontando a musulmanes, hindúes, judíos y budistas
que no celebran la Navidad, quedan menos
de 400 mil que recibirían en principio regalos
del Viejo Pascuero.

Un promedio de tres y medio "niños" por casa,
obligaría a Santa Claus a desplazarse a más
de mil kilómetros por segundo en su trineo
y destinar una milésima de segundo por casa
(lo que demora el ala de una mosca en vuelo
en batir una vez de arriba a abajo.

En esa milésima de segundo
tiene que bajar por la chimenea,
dejar los regalos junto al árbol,
beber un vaso de leche
y comer una galleta de jengibre
y subir por la chimenea nuevamente
para continuar su alocada carrera
nocturna en el trineo.

Un vaso de leche de 125 cc.
por cada casa corresponde a 
trece y medio millones de litros de leche
en total (equivalente a 7 piscinas olímpicas).

Una galleta de jengibre tiene 30 calorías,
el consumo de toda la noche 
es de 324 millones de calorías
(se podría correr más de dos millones
de maratones).

Con tanto ajetreo el consumo calórico
de Sinterklaas debe estar en el orden
de los centenares de millones de calorías
y, además con ese traje, seguro
que transpira (suda más bien,
sobre todo en Sudamérica)
el equivalente a varias piscinas olímpicas).

Además, suponiendo que cada niño
se le entregue un regalo de 900 gramos,
el trineo parte del Polo Norte
con un cargamento que supera
leas 320 mil toneladas,
para lo que se requieren
cerca de 215 mil renos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

COMENTE SIN RESTRICCIONES PERO ATÉNGASE A SUS CONSECUENCIAS