por Mentessana Diario El Mercurio, Día a Día, Sábado 02 de Julio de 2011http://blogs.elmercurio.com/editorial/dia-a-dia/contra-todos-los-temblores.asp Cuando el 5 de julio de 1572 (1575 dicen otras fuentes) se iniciaron los trabajos para construir la iglesia san Francisco en plena Alameda de las Delicias (o La Cañada), nadie imaginó que ese hermoso templo de adobe quedaría destruido pocos años después por un fuerte temblor. Esto ocurrió cuando no se conocían Richter ni Mercali. La reparación tuvo sus bemoles. Maestros y aprendices sudaron la gota gorda para restablecer el monumento, hasta que, ¡por fin!, a partir del 23 de septiembre de 1595, la imagen de la Virgen del Socorro pudo ocupar el sitial que le correspondía. No todo fue coser y cantar. La construcción finalizó en 1613, pero entonces, eso sí, se veía un edificio de envergadura, con mayor resistencia a las inclemencias telúricas. Las crónicas de la época narran que el terremoto de Santiago, ese fatídico 13 de mayo de 1647, fue terrible. Nuevos y serios daños sufrió el templo capitalino: perdió la torre y todo el segundo piso de los claustros. No obstante, después de cada terremoto, sacaba fuerzas de flaqueza para levantarse y seguir guiando a las ovejas. La nueva torre fue diseñada por el arquitecto Fermín Vivaceta. Ignoro cuántos sismos más ha resistido ese magnífico templo colonial. Sé que el último fue ese catastrófico día de febrero de 2010. Hoy, por D.S. N° 5.058 del 6 de julio de 1951, la iglesia es Monumento Nacional. Verla en pie, por fortuna, pese a tanta destrucción, invita a pensar que, a lo mejor, tiene santos en la corte.
▼
No hay comentarios:
Publicar un comentario
COMENTE SIN RESTRICCIONES PERO ATÉNGASE A SUS CONSECUENCIAS